El lightsaber no solo es un objeto de deseo para geeks, también es un buen ejemplo y un buen momento – May the fourth – para hablar de cómo George Lucas convirtió la luz y sus características físicas en simbolismos dentro de Star Wars.
Hace mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana… o al menos hace algunos años, en la imaginación de George Lucas surgió una historia que llevaría a muchísima gente a viajar por el espacio, conocer criaturas extrañas y horripilantes como Jabba the Hutt, o tan ridículos y desagradables como Jar Jar Binks.
Los seguidores de la saga reconocen y celebran el 4 de mayo como el día de Star Wars. Esta celebración tiene su origen en la frase “May the Force be with you” (Que la fuerza te acompañe), una de las citas más icónicas que se repite con algunas variantes a lo largo de la serie y que fonéticamente es parecida a May the fourth (4 de mayo). Seguramente la fecha no tiene coincidencia con el calendario estándar de Coruscant pero, es lo que tenemos en la Tierra (chiste de fan).
En la brillante mente de Lucas también surgieron batallas entre grandes ejércitos, rebeliones, androides, mortíferos rayos láser, princesas en peligro – aunque luchonas e independientes, ¡en serio! – y para rescatarlas también tenían que existir caballeros armados con espadas. Pero, en La Guerra de las Galaxias no podrían utilizarse cualquier tipo de espadas, así es que Lucas les agregó luz, unos sonidos algo extraños y las nombró lightsaber. El lightsaber o sable de luz se convirtió en otro de los íconos de la saga y un símbolo representativo de aquellos personajes adiestrados en el uso de la Fuerza, tanto del lado Jedi, como del lado oscuro, los Sith.
El lightsaber no solo es un objeto de deseo para geeks, también me parece un buen ejemplo y un buen momento – May the fourth – para hablar de cómo George Lucas convirtió la luz y sus características físicas en simbolismos durante toda la saga. En primer lugar, la luz del lightsaber es un símbolo de poder y a través del color refuerza el carácter de los personajes que lo utilizan. Así, vemos que la mayoría de los personajes del lado oscuro portan sables de color rojo, mientras que los Jedi los utilizan, generalmente, en color azul o verde. En ese sentido, el color de la luz tiene una carga simbólica. El color rojo se percibe como agresivo y refleja el odio y poder que se encuentra en el lado oscuro; mientras que el azul y verde nos comunican la paz interior, sabiduría y concentración que se requieren para pertenecer al camino de la Fuerza.
Me gustaría pensar que Lucas también tuvo la idea de usar los colores en esa escala de acuerdo con la longitud de onda.
Los sables de colores con más energía estarían en manos de los Jedí; y los Sith, los del lado oscuro, tendrían espadas con el color de mayor longitud de onda, es decir, el de menos energía. De esta manera, Lucas habría definido un lugar a cada personaje en esta dualidad de la luz entre el bien y el mal.
Tal vez la referencia más constante que Lucas hace en torno a temas relacionados con la luz es, paradójicamente, el lado oscuro, y solo menciona de forma implícita que existe un camino de la luz. (Spoiler alert) A lo largo de las seis películas de la saga principal, se ve al personaje protagónico pasar de un lado al otro de la Fuerza. Así es como Anakin Skywalker llega a transformarse en Darth Vader.
Solo me queda agregar que, seguramente si George Lucas no hubiese tomado la LUZ como inspiración, ese universo fantástico llamado Star Wars no existiría como lo conocemos.