“La luz es una narrativa emocional.” —Olafur Eliasson
Olafur Eliasson es uno de los máximos exponentes del arte contemporáneo de nuestros tiempos. Con una sensibilidad innata, sus obras generan emociones profundas desde la existencia. Eliasson afirma que el arte no es para decorar el mundo y hacerlo ver mejor; el arte, es creado única y exclusivamente para tomar responsabilidades y acciones.
Su obra plantea la relación y la configuración del cuerpo en el espacio. Existe una gran diferencia cuando un cuerpo es parte del espacio, cuando se adentra en él y cuando un cuerpo está posicionado estático frente a un lienzo o una fotografía. Los fundamentos del arte de Eliasson exploran la interrelación de la individualidad y la colectividad, buscando que ambas puedan coexistir en un mismo espacio sin necesidad de polarizarlas.
Parte de las obras de Eliasson están relacionadas con la naturaleza, en especial con los paisajes de Islandia, lugar donde pasaba los veranos desde que era pequeño. Beauty (1993) hace alusión a una cascada que funciona por medio de un aspersor, que rocía agua dentro de un cuarto totalmente negro y oscuro. Frente a la cascada está dirigido un spotlight que proyecta luz hacia ésta, generando un arcoíris en movimiento.
Los colores del arcoíris son generados cuando la luz rompe el espectro visible en una gota de agua. Si existen muchas gotas, existen muchos colores. En Beauty, todos los arcoíris son distintos porque nuestros ojos nunca están ubicados en el mismo lugar, el arcoíris que yo estoy viendo difiere al de la persona a mi lado o al de la persona detrás mío. Las realidades son individuales y relativas.
Un planteamiento significativo de las obras de Eliasson, es que el visitante utilice el espacio para la auto examinación, convirtiéndose este en cocreador y productor de la obra.
Un ejemplo que prueba este fundamento, es la instalación Your Uncertain Shadow (2010), una sala que parece estar vacía, pero al entrar, te percatas que existe una sombra en el muro. Los usuarios, en efecto, son los creadores del contenido. Al bloquear las fuentes de luz, los cuerpos generan una secuencia de sombras de colores en el muro frontal.
La pieza es muy divertida, ya que interactúas con tus sombras, participas con la pieza y con otros visitantes, generando presencia y movimiento, desencadenando conciencia corporal; tu cuerpo bloquea la luz creando sombras y movimientos. El hecho de ser parte de la pieza, en conjunto con los demás extraños, genera un sentido de comunidad que es clave para una obra de arte. Sin los cuerpos de los visitantes, el espacio se vuelve blanco, vacío.
Your blind passenger (2010) utiliza neblina y luz para restringir la percepción visual de los visitantes mientras caminan por un túnel, invitándolos a explorar otras maneras de navegar en el espacio. Al obstruir la visión parcialmente, otros sentidos se amplifican y, al navegar el espacio con la vista nublada, el inconsciente colectivo genera sentimiento de confianza hacia los desconocidos que están compartiendo la misma experiencia.
¿Qué significa caminar en el espacio? ¿Cómo se siente la luz? ¿Cómo me siento yo al moverme en este espacio incierto?
Te invitamos a conocer más sobre la exposición In Real Life de Olafur Eliasson en la siguiente nota.